Este país se ha vuelto loco. España vive un momento de pérdida de valores increíble y lo que es peor aún, no encuentra el camino idóneo para a la senda del equilibrio, al sendero de lo puramente bien hecho. Todo son ambigüedades, gramática parda, desorden y un sinfín de actos sin pies ni cabeza. España está perdida por mor de una política desenfrenada bajo el mandato de un paranoico llamado José Luis Rodríguez Zapatero con la complicidad de un grupo de politiquillos de tres al cuarto que barajan siempre, con incoherencias y desmanes, el presente y futuro de nuestro país.
Los nombres de Manuel Chaves (jefe de un clan familiar sumergido en una cadena de irregularidades terribles). Y que conste que digo irregularidades morales a simple vista, porque para juzgar su hay responsabilidad penal o no, están los jueces, aunque el tema huele mal, éste “manjar” político con prebendas de todo tipo huele, pero que muy mal. Mientras que en Andalucía se llega al millón de parados, cifra alarmante difícil de digerir, el tema de los ERE enciende la conciencia de muchos andaluces que en su día emitieron su voto a favor de quienes le han traicionado de manera fulminante.
Junto al que ha sido presidente de La Junta durante años y años podemos enumerar a quienes, convertidos en amos y señores del cortijo, se han “despachado” a gusto con toda la impunidad del mundo. Los nombres de los Zarrías, Pizarro, Blanco, Cabañas y tantos y tantos consejeros de la mal llamada Junta de Andalucía de todos los ciudadanos, han anestesiado a una población encerrada en un mutismo total y mirando para otro lado, cuando la mirada debió estar totalmente dirigida a los que, repito, impunemente han dilapidado el gran caudal andaluz para convertirlo en la comunidad más pobre de España junto a Extremadura.
¿Cómo podemos pedir responsabilidades a estos falsos gobernantes?¿Ha llegado el momento, bajo el control del voto, de mandarles a su casa?. He ahí el tema. El ciudadano andaluz tiene en su mano poner a cada uno en su sitio con el voto. Sin titubeos ni engaños, sin dejarse amedrentar con palabrerías morbosas ni epitafios malignos, sin agachar la cabeza con recuerdos de un pasado que es mejor olvidar, sin consignas de políticos ridículos que amenazan con retirarte el pobre salario de una pensión ridícula o de un paro que mereces tras muchos años de trabajo y esfuerzo. Ha llegado el momento de decir ¡basta!; ha llegado el momento de retirar de las poltronas a quienes se han aprovechado impunemente de una región que debe de mostrar su mayoría de edad y su inteligencia.
Andalucía con un millón de parados y España rozando los cinco millones doscientos mil. Y los políticos socialistas tienen aún la desvergüenza de hablar de recuperación económica y de brotes verdes. Zapatero, Salgado, Pepiño Blanco, Rubalcaba (Jinete de un apocalipsis interminable) y un nutrido grupo de prebostes endulzados con un poder que produce una sangría en nuestra España, continúan mintiendo en todos los sentidos; desde la lucha antiterrorista, hasta la mencionada recuperación económica que nunca llega. ¿Hasta cuando?.
Más de cinco millones de parados contemplan desolados como un mal llamado presidente del gobierno destruye algo tan hermoso como España.
