jueves, 30 de septiembre de 2010

EL FUTURO DE LA BALONA

Siempre he dicho que el futbol es un espectáculo mas que un deporte. Me refiero lógicamente al balompié de alto standing. Existe una gran diferencia entre las ligas mayores, primera y segunda división A, con respecto a los equipos amateurs y semi profesionales. La Real Balompédica Linense, o mejor dicho la recia e histórica Balona, actualmente vive un momento cargado de incertidumbre donde su peor enemigo es la indiferencia.
Días pasados hablaba con el señor Mellado encargado del tema administrativo y con el propio presidente Alfredo Gallardo al que desde aquí envío mi mensaje de solidaridad después de haber sufrido un trastorno  que gracias a Dios no ha tenido mayor importancia. Sin lugar a dudas, el futuro de la Balona es un autentico puzzle de difícil solución a no ser que llegue a la entidad blanquinegra un mecenas en forma de salvador de la patria como le ocurrió al Villarreal en su día. El trabajo de Alfredo Gallardo es encomiable recabando dinero para poder paliar la falta de ingresos en forma de abonados y taquillas. Por lo tanto hay que hablar largo y tendido del futuro de nuestro histórico equipo. Un club casi sin patrimonio y con un historial cargado de inestabilidad. Les hablo desde el conocimiento y la experiencia vivida a través de muchos años, porque debemos tener memoria histórica y recordar como el equipo de nuestros amores ha tenido que jugar en su dilatada singladura múltiples liguillas de ascensos y descensos para encontrarse después de tanto tiempo en la catastrófica e impresentable tercera división. Con 500 abonados y un numero raquítico de socios, además de unas taquillas que superan mínimamente los dos mil euros, es difícil, sumamente complicado, aspirar a altas metas. La cantera es importante pero no nos equivoquemos. Los futbolistas no brotan como los tomates en los huertos. Para ser aspirativos y altamente competitivos hay que complementar una plantilla de jugadores de  categoría contrastada en plena amalgama con lo mejorcito de la cantera. La hinchada linense posee mayoría de edad, pero sin lugar a dudas todos los aficionados del mundo quieren que su equipo gane y genere satisfacciones en forma de resultados positivos y no entrar de lleno en ese camino tortuoso que conduce a la indiferencia antes mencionada.
Por lo tanto el futuro de la Balona se nos presenta incierto y marcado por la abulia en su mas alto grado. Algunos hablan o mas  bien critican al presidente Gallardo insinuando que recibe emolumentos de la entidad y yo estoy convencido que  sin  Alfredo Gallardo hace mucho tiempo que el club blanquinegro hubiese caído vertiginosamente en picado. La habilidad y el cariño que posee el actual presidente están fuera de toda duda.
Solo me resta decir que en las distintas ocasiones en las que Alfredo ha presentado su dimisión, ninguno de los "valientes" que tanto utilizan  la gramática parda se han lanzado al ruedo de la realidad. Utilizando el símil taurino,  es  tremendamente fácil ver los toros desde la barrera.